06 enero 2015

Remembranzas


Los Reyes ya han pasado. Con ellos se va la magia de la ilusión y vuelve la cotidianidad de la razón, el fin de las vacaciones… y el recuerdo. El recuerdo de aquel niño que fui, de la tristeza que cada seis de enero, como una niebla espesa, emborronaba los días anteriores de alegre solaz y oscurecía los venideros de anunciado pesar.

Quizá lo de recuerdo se quede angosto para aquellos “días de reyes” del primer lustro de los años 60. Porque es más que eso, es pura vivencia, es todavía sentirlos en los huesos:

Mustio está el musgo del belén. Desde una esquina silenciosa nos mira la rebosante papelera llena del colorido de sus papeles. El calor de la chimenea no puede con el frío interior y sus llamas dibujan con sus sombras monstruos despiadados o el contorno de profesores amenazantes. El menor de mis hermanos da cuerda a su cochecito de lata, los demás miramos al televisor desde el sofá y escuchamos el melancólico vacío de ánimo. El reloj del salón avanza implacable hacia la hora de entrada al colegio otra vez. Otra vez las tareas, la separación… Y el frío, otra vez.

6 comentarios:

  1. Pues sí yo antes iba de alumna y ahora de profesora.

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  2. Yo con 12 años también me matriculé para profesor pero no me aceptaron...

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  3. Una preciosidad, doble, porque me ha llevado hacia mi propia infancia. Esa que no quiero recordar para no pararme. Veo la escena, el final del oasis de tiempo de las Navidades, y el frío interior que crece. La escena quieta, ante el televisor, sin que nadie sea capaz de frenar lo que vendrá: la vuelta a la sociedad.
    Un abrazo.

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    1. Dalí dijo que su deseo era aprehender el aire de Las Meninas, aire que valoraba más que las imágenes en el cuadro contenidas. Tú, en los escritos, haces lo mismo: captas lo que las palabras intentan materializar (al menos con los míos). La escena del televisor... todavía me contrae el alma.
      Un abrazo.

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  4. Sí, como todas las vacaciones, parece que el ánimo baja mucho más cuando acaban, que lo que subió durante los días previos. En unos casos es así, en otros en el orden permutado.

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    1. A mi ponme en el grupo primero, si hablamos de años de estudiante. Hoy todo es más uniforme.
      Saludos.

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